Vino rancio
Los vinos rancios son auténticos testimonios de la tradición, vinos de oxidación controlada, de color oro viejo y con un típico aroma punzante, de nueces y frutos secos. Son vinos con una graduación alcohólica elevada, vinificados a partir de uvas tanto tintas como blancas. Existen rancios dulces y rancios secos y, en Cataluña, donde son muy apreciados para acompañar los típicos panellets del Día de Todos los Santos, se conoce a este estilo de vino como vi bo 'vino bueno'. Algunos se elaboran exponiendo el vino a la intemperie en damajuanas o grandes recipientes de vidrio (en Cataluña este asoleo se conoce con la expresión de a sol i serena) mientras que otras se oxidan dejando las botas a medio llenar. Otros vinos de crianza oxidativa muy emparentados con los vinos rancios son los olorosos y creams andaluces, el fondillón de Alicante, los vinos dorados y pálidos de Rueda, las pajarillas de Aragón, algunos moscateles secos de Málaga y el vino santo italiano. En Vinissimus encontrará rancios con una excelente relación calidad-precio, al lado de verdaderas joyas que algunas bodegas se esfuerzan por recuperar del olvido.