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España
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CARRITO
Transporte gratuito a partir de 200 €

Vino tinto reserva

El término reserva asociado a un vino es sinónimo de refinamiento. La propia palabra evoca paciencia, cuidados... Lo bueno se hace esperar, vaya. Pero ¿qué significa realmente?

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TintoTinto CrianzaRioja ReservaTempranilloRibera del DueroGraciano
128 vinos

28,40

40,90

29,20

28,40

16,50

10,50

14,90

19,60

Transporte gratuito para múltiplos de 6 vinos o botellas

25,80

11,50

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/ bot. 1,5 L

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13,60

42,00

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13,50

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¿Cómo es un vino reserva?

Hablamos de vinos reserva o de reservas para referirnos, en general, a vinos de una calidad superior. Vinos que han permanecido en la bodega, madurando en condiciones óptimas de humedad y temperatura hasta conseguir el deseado equilibrio entre frutosidad y estructura. Son vinos que llegan al mercado con una textura amable, listos para ser bebidos, pero con tanino y acidez suficiente para seguir evolucionando en el tiempo también. Son vinos maduros pero con una larga vida por delante todavía. Esa calidad superior se traduce también en un precio superior, por supuesto. Cuánto más, eso dependerá de cada elaborador: prestigio, producción, exclusividad.

¿Hay buenos reservas en todas las denominaciones?

Hay buenos vinos en todas las denominaciones. Reservas o no, dependerá de la tradición de cada una. Cada consejo regulador dicta sus propias normas para que estos vinos puedan lucir la contraetiqueta de Reserva pero la mayoría coinciden en exigir un período de maduración total de tres años en bodega antes de salir al mercado. De estos 36 meses, 12 deben transcurrir en barricas de roble.

¿Es mejor un reserva que un crianza?

Si entendemos mejor en términos de calidad del producto, sí. La fruta destinada a la elaboración de un vino reserva debe reunir unas características de tanicidad, grado alcohólico y acidez, por ejemplo, de calidad superior, que aseguren el buen desarrollo y la longevidad del producto final. De aquí que la mayoría de vinos Gran Reserva solo se elaboren en las mejores cosechas.

Ahora bien, ello no significa que gustará más, ni a todo el mundo. Como tampoco será mejor ni peor que otro vino que haya sumado un tiempo de maduración similar pero que no se identifique con este perfil de vinos. Porque la tipologia de vino reserva indica también un estilo de vino, clásico, propio de la tradición española y más común en unas denominaciones que en otras. Es muy habitual hablar de reservas en Rioja y Ribera del Duero, principalmente y mayoritariamente, pero excepcional en zonas como el Bierzo, el Priorat o Jumilla.

En ningún caso puede utilizarse para categorizar grandes vinos de Burdeos o del Piamonte. Fuera de España la palabra Reserva suele responder a razones comerciales o para diferenciar un vino de otro, como el vino reservado especialmente para la familia.

¿Cuáles son los mejores vinos tintos reserva?

Los vinos de la categoría Reserva son generalmente el vino estrella de las bodegas tradicionales de Rioja. En esta denominación encontraremos reservas de precios muy variados. Es imprescindible conocer los siguientes:

En Ribera del Duero, es interesante ver cómo algunas bodegas no ofrecen toda la gama tradicional de crianza, reserva y gran reserva, pero sí el Reserva, por su perfil de vino elegante:

¿Qué platos maridan mejor con los reservas?

Los reservas suelen ser vinos muy fáciles de tomar, botellas que acaban terminándose sin darse uno cuenta. Son muy versátiles en la mesa y de los que argadan a un público más amplio. Siendo vinos más suaves, son el compañero ideal para las carnes más delicadas y los guisos más elaborados, como los platos de caza de pluma o los asados de cordero y cochinillo, o las carnes más grasas puesto que es un tipo de vino cuya tanicidad fina desengrasa muy bien el paladar. También maridan muy bien con las ensaladas tibias o los platos con setas. Los más robustos combinan mejor con las carnes curadas y ahumadas, carnes e incluso pescados asados en barbacoa. En una tabla de quesos, elijan los curados y semicurados. 

¿A qué temperatura hay que servir un reserva?

Se recomienda servir los reservas en torno a los 18º C, incluso algún grado más, pero solo si son vinos con un grado alcohólico moderado o muy bien integrado. De lo contrario, la sensación alcohólica podría llegar a ser agresiva.