La familia Kripp, propietaria de la bodega Stachlburg, se dedica a la producción de vinos según los preceptos de la agricultura biológica y ofrece destacadas elaboraciones a partir de variedades autóctonas e internacionales. La autenticidad y el respeto por la naturaleza son las premisas bajo las que la bodega produce cada año unas 30.000 botellas de vinos placenteros, de óptima factura y de gran calidad.
Los viñedos en los que crece la merlot de la bodega se localizan en Andriano, en la provincia de Tirol del Sur, a 300 metros sobre el nivel del mar, donde el clima cálido y seco y los suelos de grava y ricos en minerales ofrecen las características ideales para el cultivo de esta apreciada variedad.
Envejecido durante 18 meses en barricas de roble húngaro, la bodega produce unas 3.000 botellas de su delicioso Stachlburg Merlot. Un vino de consistente rojo granate que ofrece en nariz exuberantes y rotundos aromas primarios de frutos negros (arándano, cereza, cassis) y confitura de ciruela, sobre un refrescante fondo balsámico de hierbas y regaliz. Completan su bouquet unas ligeras notas especiadas, de cuero, de carbón y otras refinadas notas de madera. Un conjunto complejo y armonioso que equilibra la dulzura de la fruta madura con el amargo toque de sus notas balsámicas. En boca se expresa con elegancia, con unos taninos finos y una frescura convincente, con un trago largo y placentero que insiste en los aromas que encontramos en nariz.
