En el vaso, Dolcetto Boschi di Berri Prefillossera, muestra un magnífico color rojo rubí intenso con reflejos que van desde fucsia y violeta. El perfume, que recuerda a violeta y frambuesa, es intenso, amplio y persistente. El sabor cálido, envolvente, casi aterciopelado nos da sensaciones agradables de cerezas maduras y grosellas. Su estructura, armonía y persistencia nos remiten al Dolcetto tradicional, como debe haber sido a fines del siglo XIX. En cada cosecha, y en particular en el momento de las primeras degustaciones, estas emociones irrepetibles del pasado se renuevan y nos encantan.
Importante vino, va bien con aperitivos fríos y calientes, primeros platos, asados, carnes blancas y quesos frescos. El envejecimiento en botella es bueno incluso por varios años.
