Manzanos Crianza

Dentro de la gama Manzanos, el Crianza es el vino más singular y que les define como productores de vinos de Terroir. Aquí el trabajo de viticultura es fundamental. Seleccionan las mejores zonas en las fincas más emblemáticas de sus 300 hectáreas de viñedo, con el fin de elaborar vinos con un marcado carácter y personalidad. Es la selección de la selección, tanto en viñedo como en bodega. El Tempranillo proviene del viñedo más viejo, Los Poyatos, con más de 50 años. Las raíces han explorado durante los años consiguiendo que la cepa resista a la sequía y cambio climático. El Graciano proviene de la zona más pobre y alta de la finca Los Molinos con alta composición en yeso y arcilla. Con un vigor contenido, con poca lluvia y riego controlado, el viñedo produce una uva de altísima calidad que está reflejada en sus vinos más elegantes. Manzanos Crianza es un vino con frescura, concentración y mineralidad excepcionales, una singularidad que sin duda les diferencia. La calidad de la uva les asegura que el vino ya está hecho en el viñedo y se complementa en la bodega.

Vendimia manual en cajas de 12 kg, lo que garantiza el perfecto estado de los racimos a su llegada a bodega. La uva pasa por “mesas de selección” antes de entrar en los depósitos de fermentación. Fermentación maloláctica en barricas y en depósitos de cemento. Crianza en barricas de roble francés y americano durante un periodo de 18 meses. Afinamiento en botella durante un periodo mínimo de 6 meses. Embotellado sin estabilizar tras una ligera filtración para mantener al máximo los aromas y características del vino.

Color rojo picota de alta intensidad. En nariz es intenso y muy complejo. Destacan su fruta negra madura, la ciruela pasa y el regaliz. Notas especiadas, de sotobosque y recuerdos minerales sobre un elegante fondo tostado. En boca es amplio, con buen cuerpo, muy equilibrado y taninos redondos. Fresco y sabroso, con un final contundente. Recuerdos de notas frutales y especiadas características de la variedad graciano