En febrero de 1939 más de 400.000 personas cruzaron la frontera francesa huyendo de las represalias de la derrota. Este exilio masivo forzó la improvisación de campos de refugiados en el Rosellón, siendo el de la playa de Argelès el primero de ellos. Allí, fueron muchos los hombres y mujeres que continuaron su lucha por la supervivencia, y entre ellos se encontraba Agustín Pérez, abuelo de Xavi Nolla, responsable del proyecto Vins de la Memòria. Este vino cierra dicha colección de vinos, escribiendo con palabras líquidas el penúltimo capítulo vivido por Agustín en 1939.
La Plage es sentimiento y melancolía, un vino portador de memoria viva al que se ha añadido una parte por mil de vino rancio dulce de 1939, como homenaje y recuerdo a los acontecido en tan señalado año. El resto del vino es una doble vinificación de garnacha gris fermentada y envejecida en un solo tonel de castaño, junto con garnacha tinta vinificada como "blanc de noirs"; una verdadera rareza que combina un cupage de variedades y añadas insólito.
Los viñedos de Bruno Servant en el Camino de la Retirada han dado vida a las poco más de 1.000 botellas de este vino cargado de emoción contenida, memoria y lágrimas de Argelès, un vino que quiere remover conciencias y mantener vivo el recuerdo de lo que nunca más debería suceder. Para ello, nada mejor que el fruto de las cepas de garnachas que miran al noreste desde los 400 metros de altitud. El suelo de pizarra les imprime el fuerte carácter que después el tradicional tonel de castaño de 650 litro se encargará de domesticar. Fermentado por acción de las levaduras salvajes y embotellado sin filtrar, La Plage es un vino de obligatorio conocimiento, tanto por su valor histórico como por su complejidad gustativa.
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Elaboración
Clarificación y filtración
No filtrado
Viñedo
Camino de la Retirada
Suelo
Pizarra
Clima
Mediterráneo
Orientación
Nordeste
La bodega
Vins de la Memòria
Vins de la Memòria (vinos de la memoria) es el proyecto personal del sommelier catalán Xavi Nolla, un homenaje a su abuelo Agustín Pérez. 45 años después del fallecimiento de aquel ser tan querido y coincidiendo con los 80 años de la Batalla del Ebro, Xavi se propuso cumplir con la voluntad de su abuelo, que no era otra que mantener viva la memoria, no permitir que los horrores que la guerra causó cayeran en el olvido, ya que, como bien es sabido, solo aquel que no recuerda su...