Garmón

En el pueblo de Olivares, muy cerca del río Duero, los García han levantado su primera bodega adscrita a la Denominación de Origen Ribera del Duero. Pese a su indiscutible relevancia en la historia de los vinos ribereños (Vega Sicilia, Mauro, Aalto...), ésta es la primera ocasión en la que la DO y la familia García se dan la mano. La bodega llevará el nombre de Garmón Continental, derivado de los apellidos de los hijos del icónico Mariano García, Alberto y Eduardo García Montaña, y será la más pequeña del imperio García. Las uvas de cepas de más de 30 años provienen de tres minúsculos pueblos de la provincia de Burgos, de suelos areno-arcillosos y arcilloso-calcáreos, a unos 900 metros sobre el nivel del mar.

El Garmón es un vino corpóreo, con los aromas característicos de la Ribera del Duero (fruta negra no excesivamente madura, regaliz y buenos tostados), taninos redondos y con la madera bien integrada. En las pequeñas viñas donde se obtienen las uvas, se trabaja con clones autóctonos y rendimientos muy bajos; la altitud aporta frescor al vino y asegura maduraciones pausadas y equilibradas que permiten vendimiar más tarde. En boca se muestra elegante, refinado y jugoso, con taninos redondos y una enorme amplitud aromática. Pese a su buen volumen no resulta un tinto licoroso, gracias a la extracción contenida y a la elegancia de los demás trabajos en bodega.

Sin duda un vino que contribuirá a dilatar la reputación de la denominación de origen al tiempo que la de la familia García. Decántelo y bébanlo con pausa.