Esprit de Pavie

Gérard Perse, propietario del famoso Château Pavie, es el responsable de Esprit de Pavie, su proyecto más reciente en la AOC Bordeaux, que arrancó con la añada 2008. Con él busca ofrecernos un vino de precio asequible, aunque elaborado siguiendo los mismos principios utilizados en la elaboración de sus vinos más grandes: un vino en que la fruta sea la protagonista, un vino redondo, maduro y equilibrado, que pueda disfrutarse tanto en su juventud como tras varios años de reposo en botella.

Las uvas usadas en la elaboración del Esprit de Pavie provienen de una gran diversidad de suelos situados en las colinas de orientación sur del valle del Dordoña, en los que se mezclan las arcillas calcáreas y las gravas. Al tiempo, algunas de la cepas de Saint-Émilion y Côtes de Castillon que antes cedían sus frutos al segundo vino de Château Pavie, ahora se usan para el Esprit de Pavie.

El vino envejece en barricas que han sido previamente usadas previamente (una única vez) en la elaboración del gran Château Pavie, y recibe los mismos cuidados y atenciones que su hermano mayor. En su corte predomina el merlot, con 2/3 del total, aportándole la redondez al vino; el tercio restante se lo reparten cabernet franc y cabernet sauvignon, responsables de la estructura y la profundidad.

De color violeta muy atractivo y aromas frescos y generosos que recuerdan las cerezas, los arándanos y las grosellas negras, la nariz del Esprit de Pavie es una absoluta delicia. A los aromas primarios se unen finos toques terrosos y especiados que añaden una buena dosis de complejidad al conjunto. En boca es jugoso y de taninos aterciopelados, de cuerpo medio y textura granulosa. Pese a que el vino muestra los cambios propios de cada añada, la elegancia es siempre su hilo conductor, desde su encantadora aromática hasta su dilatado postgusto.