Esculle de Solabal

La maceración carbónica es la forma de fermentar la uva que tradicionalmente se ha realizado en La Rioja, sobre todo en los pueblos situados en las estribaciones de la Sierra Cantabria, y Solabal se ha caracterizado desde su creación por alternar, en la elaboración de sus vinos, la maceración carbónica con la fermentación de uva despalillada. Con Esculle de Solabal, pretenden recuperar el vino que se produce en una fase concreta de la maceración carbónica, considerada por los cosecheros elaboradores como el mejor, el más concentrado.

En el proceso de maceración carbónica, una vez que se decide realizar la saca de un depósito (separar el vino de la pasta de racimos de uva en fermentación), que se obtiene es un primer vino llamado 'clara', de calidad inferior por su débil coloración, graduación y cuerpo; a continuación, dentro del depósito, dos personas irán acumulando los racimos (en los que todavía quedan uvas enteras sin romperse y con vino fermentando dentro de los granos), primero sobre una mitad del deposito, pisándolos al mismo tiempo, para que el vino fluya del interior de los granos, y luego sobre la otra mitad (repiso) y lo dejarán hasta el día siguiente; durante la noche (trasnocho), irán rompiéndose todos los hollejos de las uvas por el propio peso de los racimos y por el proceso de fermentación en el interior de los granos de uva. Esculle de Solabal es este vino de trasnocho que va pasando del depósito de fermentación a otro, por gravedad, escullando lentamente. Un vino concentrado y completo que ha permanecido en barrica francesa nueva durante 18 meses para realzar su complejidad.