El Badiu

Durante los intensos bombardeos que sufrió la ciudad de Badalona en 1938, gran parte de la población se refugió en la Serra de Montigalà. Los viñedos de las masías de Canyet, principalmente el de Ca l'Alemany, acogieron y alimentaron a varias familias que buscan un lugar donde esconderse y dieron refugio a algunos de los famélicos soldados que volvían del Ebro, entre ellos Agustín Pérez, abuelo de Xavi Noya, responsable del proyecto Vins de la Memòria.

La uva de la variedad pansa blanca con la que se ha elaborado este vino, nace de la única parcela productiva de esta variedad que queda en todo Badalona. Los viñedos recuperados de Can Coll, en Canyet, reclaman el origen y la historia, que desde Vins de la Memòria se pretenden honrar. Su nombre, el Badiu, hace referencia a los patios interiores típicos de las casas de Badalona, espacios a cielo abierto en los que tradicionalmente se ubicaba el pozo y que constituía un verdadero núcleo doméstico en el que, sin duda, tuvieron lugar largas conversaciones de peso histórico. De El Badiu se elaboran poco más de 1.000 botellas, utilizando toneles de madera de castaño y dejando las uvas en contacto con su mosto, tal y como se hacía antes en estas masías. Con este vino Xavi Noya nos quiere recordar un capítulo familiar, quiere simbolizar un retorno a las raíces y reivindicar la viticultura de Badalona.

Los suelos de granito descompuesto y arcillas, a unos 150 metros sobre el nivel del mar, cubren las raíces de unas cepas que se extienden sobre poco más de 0,2 hectáreas. De su preciado fruto se obtiene este vino de intenso tono pajizo y nariz profunda marcada por los recuerdos de fruta blanca, hinojo y piel de melocotón. Aparecen con algo más de tiempo en la copa el perfume de los cítricos y el frescor del bosque mediterráneo. Amplio y salino, a la par que ligero y elegante, El Badiu es un vino para todos los públicos que nos transporta a otro tiempo y a otro modo de elaborar vinos.