Cruor

Fundada en el año 2000, Casa Gran del Siurana es la apuesta de Perelada en tierras del Priorat. Localizada en Bellmunt del Priorat, la bodega se compone de dos fincas claramente diferenciadas: Casa Gran, 10 hectáreas de terrenos ricos en sedimentos fluviales y donde se encuentran además las instalaciones de la bodega que un día pertenecieron a los monjes cartujos; y La Fredat, 40 hectáreas de suelos de llicorella dispuestos en terrazas de diferentes orientaciones y alturas que confieren gran amplitud de matices a la uva.

Cruor nace en esta finca La Fredat y el carácter mineral de estas tierras de pizarra impregna claramente la personalidad del vino. Podrán apreciarlo tan sólo abrirlo y servirlo, con los ojos cerrados: indudablemente, es Priorat. Y para quienes todavía puedan tener alguna duda sobre la excepcionalidad de este terruño, fíjense en la composición, además de las autóctonas samsó y garnacha, Cruor contiene un considerable porcentaje de la foránea syrah. No obstante, su personalidad la define el suelo (la inconfundible llicorella), el clima (la calidez mediterránea), el entorno, el paisaje (las plantas aromáticas que perfuman la copa)..., en definitiva, el terruño.

Vendimiadas manualmente en su punto óptimo de maduración, cada variedad es vinificada por separado en depósitos de acero inoxidable antes de iniciar su proceso de maduración, a lo largo de 16 meses, en barricas de roble francés de 225 litros, de la cuales un 50% son nuevas y el resto de segundo año. El resultado es un vino mineral e intenso que refleja muy bien cómo es el carácter de los prioratos tradicionales, al mismo tiempo que se presenta moderno y serio, como corresponde a una bodega del grupo Perelada; un priorato en el que se aprecia la madurez de la fruta, una muy buena acidez y el frescor de la pizarra. Sorprende, y agrada, la facilidad con la que se deja beber; en definitiva, un priorato con mucha tipicidad, fresco, sedoso, graso, muy recomendable.