Atance Bobal

Atance es uno de esos vinos que, con tan sólo un sorbo, deja ver una buena frutosidad, carácter y jovialidad. Es un vino ecológico, apto para veganos y de finca, elaborado al 100% con la variedad bobal. Las cepas se cultivan sobre suelos arenosos a una altitud de 800 metros, parámetros ambos que le aportan una buena dosis de elegancia. En el interior de la provincia de Valencia y bajo estricto régimen de secano, las cepas en vaso deben batallar por encontrar su sustento.

La uva se vendimia y se selecciona a mano en el campo. Después, en bodega, fermenta a temperatura controlada en depósitos de hormigón y acero, con un ligero trabajo de lías que aporta algo de boca y un extra de redondez. Tras 6 meses de crianza se embotella entre abril y mayo, para llegar a nuestras copas con un bonito color cereza y un perfume insinuante, de fruta negra y regaliz, algo especiado y de marcada mineralidad. Su tacto es jugoso, casi tierno, como el de una mora dulce y madura. De entrada delicada, pronto se apodera de hasta el último milímetro de la boca y lo recubre de una amabilidad bien contrarrestada por los precisos tonos amargos que recuerdan a las semillas de cilantro. Resuena tras cada sorbo con un halo de frescor boscoso. La fruta mantiene el equilibrio perfecto entre acidez cítrica y sensaciones maduras, mientras la aparente fragilidad de su capa se convierte en carácter directo y honesto en boca. Muestra a cada instante un gran respeto por la variedad y por su cultivo, culminando su recorrido con transparencia, gran expresividad y un largo recuerdo.