Grignolino

Variedad típica de las colinas del bajo Piamonte, la grignolino se ha utilizado siempre para elaborar vinos tintos ligeros, enérgicos, habitualmente frizzantes, vinosos, afrutados y fáciles de beber. En la actualidad se cultiva sobre todo en las colinas septentrionales de la provincia de Asti y la región de Casalese, donde convive con la barbera y otras uvas típicas del territorio. Vinificada mezclada con otras variedades en la DOC Monferrato Rosso, se le reconoce una buena complejidad incluso como monovarietal de cierto nivel. Las mejores versiones, de hecho, provienen de cepas viejas y demuestra unos resultados nada menospreciables, algunos excelentes, incluso criados en madera, allanando el camino para una nueva y más austera interpretación de la variedad.