Vinos italianos: las "4 Viti" 2021
Los vinos que han obtenido la máxima puntuación de la Asociación Italiana de Sumilleres. ¡Conózcanlos!
Italia cuenta con una sólida tradición en el ámbito de la sumillería. De hecho, el nacimiento de la Asociación Italiana de Sumilleres se remonta a 1965, siendo una de las primeras organizaciones del mundo en dar forma y estatus al arte de degustar, servir y describir el vino. Durante todos estos años la entidad ha formulado planes educativos y creado fichas de cata para la formación de sumilleres, y está reconocida como una de las plataformas más eficaces a nivel internacional, siendo destacable el hecho de que, en Italia, los diplomados a los cursos de esta asociación reciben un certificado oficial de capacitación profesional, legalmente reconocido.
Vitae, además del nombre de una revista de análisis en profundidad, es también el título de la guía de vinos italianos que la Asociación Italiana de Sumilleres publica desde el año 2015. Está considerada, junto con las de Gambero Rosso, Espresso y Slow Wine, una de las más autorizadas sin duda en cuanto a vinos de Italia. Sus valoraciones se emiten en una escala de uno a cuatro puntos, representados con cuatro iconos de cuatro cepas (viti, 'cepas' en italiano), y describen la degustación de unos 30.000 vinos al año. Las catas, a ciegas, son realizadas por los propios sumilleres de la asociación, miembros habilitados para las degustaciones profesionales. Un vino de cada región recibe además, cada año, la distinción de un simbólico catavinos especial, que se añade al trofeo de las 4 Viti, identificándolo como el mejor producto regional.
El noroeste
¡El siempre laureado Piamonte... más algunas gotas de Lombardía! Gracias a la excepcional cosecha 2016, la nebbiolo se desmarca en la clasificación y ocupa casi todas las posiciones de relieve. Tanto los vinos de las Langhe como del alto Piamonte ofrecen excelentes resultados, que perdurarán en el tiempo. La Lombardía toma también sus puestos con sus mejores franciacortas y algún que otro tinto, procedente de Valtellina y los valles de Bérgamo, imprescindibles en cualquier bodega de un buen amante del vino. En la Emilia, atención a los lambruscos: ¡verán cómo enloquecen con al menos dos, por su relación calidad/precio!
El nordeste
Máximas puntuaciones para algunos espléndidos amarones, soaves y proseccos superiores, que consolidan la posición de liderazgo del Véneto. Los grandes nombres, representados por sus clásicos blancos internacionales, se erigen como los embajadores del Alto Adige. Desborda el Friuli llevándose a casa muchísimos podios de 4 Viti con sus blancos del Collio y del valle del Isonzo. También los vinos naranja o orange wines destacan en algunas posiciones desde esta zona, cuna de su tipología.
La Italia central
¡Toscana... y otras! Obviamente se desmarcan en cabeza los extraordinarios brunellos 2015, pero obtienen excelentes resultados también los vinos de otras zonas, desde Bolgheri a Chianti Classico, de Morellino a los numerosos supertoscanos esparcidos por la región, a pesar de no haber sido precisamente felices las añadas más recientes. Preciosas noticias llegan de las Marcas, donde la verdicchio se confirma como la variedad blanca más apreciada y convincente de la Italia central. Los tintos del Lacio siguen siempre en auge, y ha llegado el momento de conocerlos a fondo.
El sur y las islas
En el sur del país todos los grandes nombres de la viticultura de calidad se confirman como se esperaba, desde los mejores montepulcianos de los Abruzzos a los blancos de Campania, cada vez más populares desde hace años: los greco di Tufo y los fiano di Avelino. En Apulia y Salento destacan los primitivos más equilibrados y envolventes al lado de los rosados cualitativamente más significativos. Sicilia, más allá de los premiadísimos vinos del Etna, consigue para sí grandes éxitos con unos vinos de Marsala ahora totalmente revalorizados y, por descontado, también de Passito di Pantelleria.