Fattoria Alois

Una histórica familia de la región, dedicada al arte de la seda de San Leucio. Una identidad vinícola muy marcada y recuperada con fuerza. Estos son los fundamentos de la aventura emprendida por Fattoria Alois en el norte de Campania, en la provincia de Caserta, un lugar que era la cuna no solamente de la clásica mozzarella sino también de antiguas variedades a la espera de ser redescubiertas. Desde las laderas de los montes Caiatini, en una casa rural que perteneció a la dinastía de los Borbón, la familia Alois ha salvaguardado el patrimonio y la tradición vitivinícola de Pontelatone, pero también de todo el territorio volcánico y montañoso de Matese y Roccamonfina.

Los principios de la casa son simples: poner en juego el altísimo nivel de las variedades autóctonas de Caserta, sin perjuicio de las grandes variedades clásicas de Campania, desde la fiano a la greco, desde la falanghina a la aglianico. Pontelatone, el centro neurálgico del vino local, es el hogar de la casavecchia, una variedad tinta con una poderosa estructura y un nervio ligeramente rústico y agreste. La sabia crianza en roble de esta variedad puede exaltar su textura áspera, de excelente y armoniosa acidez. El muy longevo Trebulanum es un gran ejemplar de esta variedad y el gran vino de la familia.

Si Alois es una revelación, la revelación de la revelación ha sido sin duda la vinificación de la variedad pallagrello bianco que encontramos en Caiatì, un vino blanco mediterráneo y muy mineral, cálido y con una aromática levemente especiada. También en el paladar se revela magnífico, con frescura y suavidad y con un toque justo de madera que enriquece suu carácter. El tinto Cunto es un verdadero campeón, vigoroso, estructurado, suave, intrigante... Tras un año de barrica convence tanto a los amantes de los vinos austeros que buscan la rusticidad y mineralidad de la uva autóctona, como a los amantes de los vinos más internacionales que buscan la madurez y el refinamiento.