Dettori

Logudoro, el "lugar dorado". Aquí, en las colinas del noroeste de Cerdeña, la familia Dettori ha invertido grandes esfuerzos, tanto en el viñedo como en la bodega, en la elaboración de un vino histórico y de una naturalidad alejada de las exigencias del mercado.

En las colinas de Badde Nigolosu, las más altas de Sennori, a 250 metros sobre el nivel del mar, y sobre los suelos blancos ricos en caliza. Aquí, el riguroso cuidado del viñedo y el permanente control de los procesos de vinificación han sido la base del trabajo de esta bodega a lo largo de tres generaciones, hoy una de las más apreciadas por los amantes de la biodinámica.

Sin levaduras añadidas, sin filtraciones , sin adición de sulfurosos ni cualquier otro producto incluso en las añadas menos favorables. Con crianzas en depósitos de hormigón y cristal que se alargan duarante el tiempo que sea necesario. Sin necesidad de estrategias comerciales ni de establecer contactos con guías y críticos especializados, que hoy en día adquieren los vinos como cualquier otro consumidor y los recompensan con valoraciones superiores a los 90 puntos en muchas añadas.

Los vinos de Dettori no necesitan nada ajeno al territorio y a las cepas centenarias de las que proceden. Las variedades autóctonas, vinificadas en toda su pureza, dan lugar a vinos con carácter, listos para ser aireados y disfrutados y cada uno con una propia historia que contar.

Tenores, la esencia y la personalidad de la cannonau en un vino concentrado y amable. Il Bianco, la expresión más territorial, sabrosa y mineral de una vermentino macerada. Chimbanta, la exaltación de la variedad mónica en una brillante puesta de largo.