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Bodega Vinessens
Vinessens es una pequeña bodega familiar en la que sus jóvenes propietarios, Andrés Carull y Marta Ribera, elaboran vinos de autor y/o garaje con una filosofía...
Año de fundación | 2008 |
Viñedo propio: | 70 / ha |
Producción anual | 180.000 botellas |
País | |
Regiones | |
Uvas |
Vino de Bodega Vinessens
Bodega Vinessens
Vinessens es una pequeña bodega familiar en la que sus jóvenes propietarios, Andrés Carull y Marta Ribera, elaboran vinos de autor y/o garaje con una filosofía ecológica.
Con la misma pasión y manera de entender el vino, Andrés y Marta apuestan por el trabajo en ecológico, el máximo respeto por la naturaleza y por las variedades tradicionales, para elaborar vinos que sorprenden a los paladares más expertos. El contraste entre el Mediterráneo próximo y el frescor de la altitud del Alt-Vinalopó da vida a unos vinos modernos y expresivos que se alimentan de lo mejor de la tradición alicantina, pero que miran también sin complejo alguno al futuro y al mercado internacional. Prácticas tan en boga hoy en día como el uso de tinajas para las vinificaciones, son habituales en Vinessens.
Llegado el año 2017, Marta y Andrés, adquirieron Casa Balaguer, del comprometido y reputado Rafa Bernabé, con el claro objetivo de seguir elaborando grandes vinos en un estilo muy próximo al que Rafa había definido durante sus años al mando de la bodega. Ecología y variedades tradicionales siguen siendo la clave de un proyecto que, pese a haber visto renovadas algunas etiquetas, conserva intacto el espíritu singular e innovador que su creador impuso hace casi ya dos décadas. En la actualidad, ya como Vinessens, la bodega sigue elaborando vinos que desde la modestia y la mínima intervención no pueden evitar ser grandes.
Tragolargo y El Telar son dos de los mejores ejemplos del estilo de dos pequeñas casas unidas para crear grandes vinos. Ambos, como no podía ser de otra forma, con la seductora uva monastrell como base. Fresco, elegantemente austero, balsámico y envolvente el primero; floral, mineral y goloso el segundo, ambos vinos dibujan un nuevo y brillante horizonte para el vino alicantino.