Bodegas Juan Gil

El origen de las Bodegas Juan Gil se remonta a 1916, cuando Juan Gil Jiménez construyó la bodega. Ahora, es ya la cuarta generación la que dirige el proyecto, conjugando el saber tradicional con los equipamientos y conocimientos más actuales.Desde sus inicios, una sola idea ha movido a las sucesivas generaciones que se han hecho cargo de ella: hacer un buen trabajo y llevar con orgullo el nombre de su marca, aplicando los conocimientos tradicionales del oficio transmitidos de padres a hijos

La bodega actual, puesta en marcha en 2002, se asienta sobre suelos muy pobres a unos 800 metros de altitud. El clima es extremo, con fuertes contrastes térmicos y lluvias prácticamente inexistentes. Los suelos pedregosos de arena y caliza se esfuerzan por retener la escasa lluvia. Las 120 ha de viñedos que rodean la bodega están plantadas en su mayoría con la uva monastrell, auténtica vedete en el proyecto Gil. Cultivan también algunas variedades internacionales como la syrah, la cabernet sauvignon, la merlot y la petit verdot que suman fruta y especias en algunos cortes, pero son las viejas cepas de monastrell, uva presente en todos los tintos, las que definen el carácter de los vinos de la bodega. La situación de la misma junto al viñedo permite el seguimiento exhaustivo de la evolución de la uva, condición necesaria para la obtención de grandes productos.

En la actualidad los vinos de Juan Gil ofrecen todo el carácter histórico de la región pero perfilado y potenciado por un conocimiento profundo de la uva y la tierra que hace de sus vinos productos expresivos al tiempo que amables que enamoran a todo aquel que los prueba.

Bodegas Juan Gil pertenece a Juan Gil Bodegas Familiares, un grupo de bodegas que comparte acciones de comunicación y promoción con otras bodegas, del que forman parte también Bodegas Atalaya, Bodegas Ateca, Bodegas El Nido, Bodegas Tritón, Cellers Can Blau, Orowines, Lagar Da Condesa y Bodegas y Viñedos Shaya.